El buitre en su hábitat natural

Los buitres son unos pájaros muy grandes y feos que se comen a los animales que se mueren. Aunque no lo creas, los buitres son muy importantes para la naturaleza y el ser humano, porque nos ayudan a limpiar el planeta.

Te voy a explicar algunas cosas sobre ellos, pero de una forma fácil y divertida, para que puedas entenderlas mejor.

Los buitres son importantes porque:

Evitan que se propaguen las enfermedades. Cuando los buitres se comen a los animales muertos, hacen que no haya basura ni mal olor en el campo.

Ahorran dinero y energía. Si no hubiera buitres, habría que gastar mucho dinero y recursos para recoger y transportar a los animales muertos hasta unas fábricas donde los queman o los entierran. Eso contamina mucho el aire y la tierra, y hace que se gaste más gasolina y electricidad.

Mantienen el equilibrio ecológico. Los buitres forman parte de la cadena alimenticia, que es como se llama a la relación que hay entre los seres vivos que se comen unos a otros.

Los buitres se comen a los animales que ya no sirven, y así dejan espacio y comida para los que están vivos.

Los buitres viven en diferentes partes del mundo, pero sobre todo en África y Asia, que es donde hay más animales salvajes. También hay algunos buitres en Europa, como el buitre leonado, que vive en España y tiene el cuello de color rojo.

Los buitres suelen vivir en lugares altos, como las montañas o los acantilados, donde hacen sus nidos. Les gusta volar muy alto, aprovechando el aire caliente que sube del suelo.

Los buitres comen carne, pero solo la de los animales que ya están muertos. No cazan, porque no tienen garras ni dientes afilados para hacerlo.

Tampoco mastican, sino que se tragan trozos enteros de carne. Luego, echan unas bolas con lo que no pueden digerir, como los huesos o las plumas. Esas bolas se llaman egagrópilas, y los científicos las estudian para saber qué comen los buitres. 

¿Qué rima hice cuando lo vi?

En lo alto del cielo, un buitre planea,
con alas desplegadas, la vista agudiza.
Sobre la tierra seca, su sombra pasea,
buscando el festín que la vida eterniza.

Majestuoso en vuelo, sin prisa se mueve,
el rey de los aires, en círculos gira.
No hay secreto en el viento que no se atreve
a descubrir, mientras en lo alto suspira.

Con ojos de lince, el horizonte barre,
ningún detalle escapa a su mirar profundo.
En el ciclo de la vida, él no se amilana,
pues en la muerte halla su sustento fecundo.

Aunque su figura inspire temor y respeto,
el buitre cumple un rol que la naturaleza dicta.
Limpia la tierra, en su labor es perfecto,
en el gran diseño, es una pieza crítica.