Termita
¿Qué son las termitas? Las termitas son bichitos pequeños que viven en el suelo, en los árboles y en las casas. A veces, la gente se asusta de ellas porque pueden comer madera y dañar las casas. Pero, en realidad, las termitas son muy útiles para la naturaleza.
¿Dónde viven? Las termitas viven en colonias, como si fueran una gran familia. Construyen casitas subterráneas o montículos de tierra en los bosques y selvas. A veces, también se esconden en las paredes de las casas. ¡Son como pequeñas arquitectas!
¿Qué comen? Adivina qué: ¡las termitas comen madera! Pero no solo eso, también se alimentan de hojas, hierba y otros trocitos de plantas. Tienen una barriguita especial que les ayuda a digerir la celulosa de la madera. ¡Es como si tuvieran un superpoder para comer cosas duras!
Cosas curiosas sobre las termitas: Recicladoras: Las termitas son como las recicladoras del bosque. Cuando un árbol se cae, ellas lo descomponen en pedacitos más pequeños. Así, los nutrientes vuelven al suelo y ayudan a las plantas a crecer.
Túneles secretos: Las termitas construyen túneles bajo tierra. Estos túneles ayudan a que el agua y el aire lleguen a las raíces de los árboles. ¡Es como si hicieran autopistas subterráneas para las plantas!
Amigas de las plantas: Las termitas protegen a las plantas jóvenes construyendo montículos de tierra alrededor de ellas. ¡Es como si les dieran abrazos de tierra para que crezcan fuertes!
Así que, aunque algunas personas no les gusten, las termitas son como las peques del bosque.
¿Qué poesía hice cuando las vi?
En un mundo pequeño, bajo un sol radiante,
mis ojos de niña vieron algo fascinante.
Pequeñas criaturas, en suelo y madera,
trabajando juntas, una colonia entera.
Con dedos temblorosos, me acerqué a mirar,
termitas trabajando, sin cesar de trabajar.
Sus casitas de tierra, torres hacia el cielo,
un mundo subterráneo, un secreto desvelo.
«¿Qué hacen estas amigas, en su mundo escondido?
¿Construyen sus castillos, por humanos no vistos?»
Preguntas brotaban, como manantial claro,
en mi mente infantil, un misterio disparo.
La naturaleza me enseñó una lección,
de trabajo en equipo y gran dedicación.
Y aunque solo una niña, pude comprender,
que cada criatura tiene su papel que desempeñar.
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